El túnel oscuro del bajón tiró hacia adentro, como el mar. Se combinaron determinadas sustancias químicas en el cerebro y parecía que no había retorno. Como la maldición que dejó dormida a la princesa por años.
Y entonces llegó él, bajado de internet y conectado a un improvisado parlante que llenó la casa de música. Cantando Incurably romantic
Yves Montand & Marilyn Monroe. Recomiendo un clic y un escuchar hasta el final.
A todo volumen, claro.
1 comentario:
buenísima!
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