martes, 8 de diciembre de 2009

Eternidad



Hoy corría por Punta Chica. De vez en cuando el canto de un pájaro. Después el silencio. Me puse los auriculares y Misia sonó como nunca. Llenó mi cabeza con su voz y quise que no terminara. De verdad quiero eso? pensé. Si lo que me hacía disfrutarla era saber que en dos o tres minutos terminaría ese tema, mi preferido.




Hay besos inolvidables. Pero si fueran interminables serían una pesadilla. Por sublimes que fueran. La posibilidad de NO TERMINAR NUNCA los hace intolerables.

Sin embargo el amor es valioso sólo si es eterno, la felicidad que dura poco no vale, la amistad debe ser para toda la vida, hay horas que no queremos que terminen nunca y las vacaciones deberían ser constantes.

Nadie cree, de verdad, en la muerte. Todos viven como si pudieran zafar. Como si fuera algo que les pasara a los demás. Uy! se murió! No me digas!

Hay una certeza de eternidad en cada uno. Hay agnósticos, hay creyentes, pero no hay quien no se crea eterno o por lo menos lo sospeche.
Sin embargo lo fugaz es intenso, lo eterno pesa. Empieza a pesar desde que termina la fugacidad.

O será que la intensidad del instante lo hace eterno más allá de nosotros?

Digo, en otra dimensión.






6 comentarios:

Anónimo dijo...

Buenisimo, tolen. Es asi. Justo el otro dia me miraba las manos (divinas, gracias al pincelito ese) mientras veia un programa sobre momias peruanas y tuve uno de esos momentos recordatorios en los que por un instante tenes la certeza de que tus propias manos se van a descomponer algun dia. Y pense algo parecido (que ni en pedo me hubiera salido asi, tan tal cual como a vos)

Y ahora mientras te leia, fui asintiendo con la cabeza , pero cuando llegué a la última línea sonreí. Lo de la otra dimensión me sonó a explicación. Explicación que sólo la encontrás en un filósofo religioso (algo asi como san agustin) o en alguien positivo. Porque un filosofo sin Dios deja todo en los pensamientos, en las preguntas. La religion la inventaron los que necesitaban respuestas, los que no podian dormir con tanta incertidumbre. Los que necesitan un final feliz. Positivos. Los chantas de siempre se encargaron del resto.
Me gusta tu paraiso dimensional.

Madame Lulu dijo...

bueno está bien, entonces la casi eternidad, para mí.

saulo dijo...

No se bien porque, pero tu escrito me hizo recordar esta letra suprema de Serrat:

Uno se cree que las mató el tiempo y la ausencia. Pero su tren vendió boleto de ida y vuelta. Son aquellas pequeñas cosas que nos dejó un tiempo de rosas, en un rincón, en un papel o en un cajón.
Como un ladrón te acechan detrás de la puerta. Te tienen tan a su merced como hojas muertas que el viento arrastra allá o aquí, que te sonríen tristes y nos hacen que lloremos cuando nadie nos ve.

Rosario dijo...

no saulo, en mi presencia esa cancion no! Nada me hace llorar mas!!! Que temazo!!!

Soledad Alonso dijo...

uy no! yo debo ser un bicho raro... por que no es que sea pesimista o que no disfrute de mi vida a pleno, todo lo contrario! vivo mi vida "fugaz" de manera intensa!
pero todo lo hago con la certeza de la muerte, porque supongo que sino me pesaria demasiado pensar en "ser eterna"... es mas, a veces hasa creo tener la certeza de que no voy a llegar a vieja (ya llegaste! me dice mi marido; que lindo!)
por eso creo que el arte es lo que va a quedar de mi, lo que si va a ser eterno en algun sentido

Verónica Tomas dijo...

Muy lindo este post, lo leí hace unos días, en días en que pienso mucho en el momento presente, en todo lo pasado, en lo que vendrá... y me encantó también la foto.
Muchos besos.